Como calcular un refrigerador de aire
Cuando tenemos que refrigerar aceite con aire, necesitamos conocer unos datos mínimos de referencia, así podremos determinar cuál es el modelo más adecuado para la aplicación:
Alimentación: Como vamos a mover el ventilador, si es con corriente eléctrica o con accionamiento hidráulico, necesitaremos saber la tensión si es 12vdc, 24vdc, 220 monofásica, 220/380 trifásica o con Motor hidráulico.
Fluido: Con que tipo de fluido vamos a trabajar: Aceite o Agua/Glicol. En los aceites y debido a la variedad tan grande que hay determinas como “normal” los aceites hidráulicos con viscosidades entre VG32, 46, 68, 100 y 150. Para aquellas aplicaciones con aceites con otras viscosidades es importante informar ya que esto modifica el cálculo a realizar.
Caudal: Es la cantidad de fluido que tenemos que enfriar, en el 90% de los casos es el caudal que da la bomba, pero en algunas ocasiones solo es necesario refrigerar una parte del caudal. En estos casos diseñaremos el sistema teniendo en cuenta esta peculiaridad.
Temperatura ambiente: Es la temperatura más elevada en la que puede trabajar nuestra máquina. Por nuestra experiencia y por la variedad tan grande de nuestro país un rango entre los 30-40ºC será lo adecuado.
Temperatura deseada: Será aquella que nuestra máquina/proceso funciona correctamente. Una temperatura normal para un sistema hidráulico está entre los 45-60ºC.
Una vez tenemos la información anterior precisamos saber la Potencia a disipar.
Potencia a disipar: Es todo el calor que estamos generando con nuestra máquina/proceso y que deberemos reducir. Por nuestra experiencia y según la aplicación lo normal será entre un 25-30%.
¿Como podemos calcular este dato si no sabemos la potencia a disipar? Para obtener este dato tenemos 2 posibilidades:
-Temperatura de entrada.
-Potencia Instalada/Necesaria.
Temperatura de entrada: Es la temperatura del fluido antes de volver al depósito. Es importante tomar este dato cuando la máquina ha funcionado durante un tiempo adecuado, así sabremos que la temperatura se ha estabilizado.
Potencia Instalada: Son los CV/KW que precisamos para accionar la bomba hidráulica. En algunas ocasiones los CV/KW instalados son superiores a los necesarios para accionar la bomba hidráulica. En estos casos con el caudal y la presión de la bomba podremos determinar la potencia que precisa el equipo y luego determinamos qué % de esa potencia vamos a enfriar.
En resumen, temperatura de entrada, caudal a refrigerar y temperatura de salida deseada. La diferencia de temperaturas y el caudal nos permiten saber la potencia que tenemos que disipar, o dicho más sencillamente, el calor que tenemos que “quitar” a nuestro aceite. Esta es la parte principal del cálculo, porque marcará el tamaño inicial de las conexiones y del radiador para una situación que podríamos denominar de “normal”.
En algunas ocasiones es complicado tener esto datos, para esos casos ponemos a vuestra disposición nuestra experiencia y conocimiento para así poder determinar cuál será el modelo más adecuado.
Y siempre, sin olvidar que no podremos conseguir un aceite más frio que el aire disponible.